Los vinos de guayaba, naranja, piña, papaya y guanábana tienen una capacidad antioxidante similar a la de los vinos blancos de uva. Un estudio del Instituto de Investigaciones para la Industria Alimenticia de Cuba puso de relieve el gran poder antioxidante de ciertos vinos elaborados a partir de frutas tropicales. Los de naranja y de guayaba se destacaron por poseer una mayor actividad antirradical y poder reductor que el resto de los vinos estudiados.
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